Astrónomos descubren la primera galaxia de anillo de colisión.
Un equipo de astrónomos acaba de capturar la primera imagen de un tipo de galaxia de gran rarez, descrita como un “anillo de fuego cósmico”, tal como existía hace 11.000 millones de años, algo que podría ayudarnos a entender más sobre cómo se forman y evolucionan las estructuras galácticas.

Credito: James Josephides, Swinburne Astronomy Productions.
Esta galaxia, bautizada como R5519, está a 11.000 millones de años luz de nuestro Sistema Solar posee una masa aproximada a la de la Vía Láctea y tiene una forma de una rosca gigante.
Los astrónomos del ARC Centre of Excellence for All Sky Astrophysics in 3 Dimensions (ASTRO 3D), en Australia, han logrado capturar una imagen de la galaxia y ahora pueden revelar cómo era hace 11.000 millones de años.
“Es un objeto muy curioso que nunca hemos visto antes”. […] “Parece extraño y familiar al mismo tiempo”.
Explica Tiantian Yuan, investigador principal del estudio.
El agujero en su centro tiene un diámetro 2.000 millones de veces mayor que la distancia entre la Tierra y el Sol y no para de crear estrellas. Yuan y un equipo científico internacional usaron datos espectroscópicos para identificar la galaxia, y la evidencia sugiere que podría ser la primera “galaxia de anillo de colisión”, que se forman como resultado del choque de dos o más galaxias, ubicada en el universo primigenio.
“Está haciendo estrellas a un ritmo 50 veces mayor que la Vía Láctea”. […] “La mayor parte de esa actividad está teniendo lugar en su anillo… así que realmente es un anillo de fuego”.
Señala TianTian Yuan.
Trabajando con colegas de Australia, EE. UU., Canadá, Bélgica y Dinamarca, el Dr. Yuan utilizó datos espectroscópicos recopilados por el Observatorio WM Keck en Hawai e imágenes grabadas por el Telescopio Espacial Hubble de la NASA para identificar la estructura inusual.
El hallazgo podría ayudar a los astrónomos a entender cómo se formó nuestra propia Vía Láctea. Para que se forme una galaxia en anillo de colisión a partir de la colisión de dos galaxias, un llamado “disco delgado” de material debe estar presente en una galaxia antes de que ocurra la colisión.
Las galaxias espirales, como la Vía Láctea, tienen todas discos delgados, y su disco comenzó a formarse hace unos 9.000 millones de años, pero esta galaxia en anillo de colisión tiene unos 11.000 millones de años.
“Este descubrimiento es una indicación de que el ensamblaje de discos en las galaxias espirales ocurrió en un período más largo de lo que se pensaba anteriormente”.
Concluye Kenneth Freeman, de la Universidad Nacional de Australia y coautor de la investigación.
El estudio fue publicado en Nature Astronomy.