El Júpiter caliente al que su estrella le “arranca” la atmósfera.
Las observaciones realizadas por el telescopio espacial Hubble de la NASA revelan algo llamativo en un exoplaneta del cuál hablamos hace casi exactamente 2 años cuando le comentamos que el telescopio detectó la primer estratósfera de un exoplaneta. Este planeta extrasolar se llama WASP-121b, y lo que lo destaca es su temperatura. Entra en al grupo de planetas llamados “Júpiter caliente“, un exoplaneta gaseoso grande muy cerca de su estrella WASP-121 que se encuentra a 900 años luz.
Su temperatura es muy alta, ya que en la atmósfera de este planeta los termómetros marcarían poco más de 2500° C. Lo interesante es que las observaciones revelan la fuga de gases de Magnesio y Hierro. Esta es la primera vez que los “metales pesados“, han sido vistos escapando de un Júpiter caliente.

Es que normalmente los planetas calientes con tamaños similares a Júpiter, todavía son suficientemente fríos para condensar esos elementos en nubes y no escapar como se ve. Generalmente en este tipo de planetas, el Fe y Mg se ven en la atmósfera inferior, de manera que no se puede detectar su fuga o no. En este caso vemos a los elementos tan lejos del planeta que no están unidos gravitacionalmente.
El pico de temperatura de WASP-121b puede ser debido al escape de estos gases. El astro recibe mucha luz ultravioleta de la estrella anfitriona, más brillante y caliente que el Sol. Los metales harían que la atmósfera sea más opaca en el ultravioleta, lo que podría contribuir al calentamiento de la atmósfera superior.
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Este exoplaneta no fue observado al azar, se eligió un mundo extremo como WASP-121b, aunque los científicos no esperaban datos tan claros. Los metales pesados escapan en parte porque el planeta es tan grande e hinchado que su gravedad es relativamente débil. Literalmente su atmósfera está siendo arrancada por la estrella .
La cercanía a la estrella hace que este cuerpo sea más ovalado, debido al gran efecto de marea que genera WASP-121. El instrumento utilizado fue el espectrógrafo de imágenes del Hubble, que buscó en ultravioleta firmas espectrales de magnesio y hierro en la luz que se filtraba a través de la atmósfera de WASP-121b cuando el planeta hacía un tránsito, es decir, pasaba frente a su estrella.

Dicho sea de paso, el exoplaneta podría ser un objetivo perfecto para el próximo telescopio espacial James Webb. El nuevo telescopio lo miraría con intenciones de encontrar agua y dióxido de carbono. De hecho, Hubble y Webb daría a los astrónomos muchísima más información sobre los elementos químicos que componen la atmósfera del planeta.
Las observaciones de WASP-121b sirve junto a observaciones de muchos más cuerpos sobre cómo los planetas pierden sus atmósferas primordiales. “Los Júpiter calientes están hechos principalmente de hidrógeno, y el Hubble es muy sensible al hidrógeno, por lo que sabemos que estos planetas pueden perder el gas con relativa facilidad“, comentaban en NASA, pero este caso particular es algo mucho más extremo.