Júpiter tiene polos caóticos
El 27 de agosto de 2016 la sonda Juno de la NASA llegó Júpiter, empezando una misión de 20 meses en la que se ha acercado a los polos orbitando al planeta de una manera bastante novedosa. Aunque ya se habían facilitado imágenes polares, los primeros resultados se publicaron en la revista Science, mostrando lo que se ve en el polo sur del planeta.
Las imágenes de los polos jovianos, no se conocían hasta la llegada de Juno, muestran un caos con estructuras ovaladas blanquecinas, completamente contrastantes a los lisos hexágonos que tiene Saturno. Estos óvalos son gigantescos ciclones donde algunos tienen hasta 1.400 kilómetros de diámetro.
La nave también midió la estructura termal de la atmósfera profunda del planeta, lo que revelaría unas estructuras inesperadas que se interpretarían como señales de acumulación de amoniaco, que brota desde lo profundo, generando gigantes sistemas climáticos.
Además, se realizaron mediciones del campo gravitatorio del gigante, ayudando a entender mejor la estructura atmosférica de Júpiter y determinar si realmente tiene un núcleo sólido.
El campo gravitatorio que medió Juno es muy distinto y más preciso que la última estimación; lo que tiene implicaciones para conocer la distribución de elementos pesados en el interior de Júpiter, incluyendo la existencia de un núcleo y su masa.