La Bepicolombo en detalle. (1).
BepiColombo tiene dos orbitadores; el Orbitador Planetario a Mercurio (MPO), de la ESA, y el Orbitador Magnetosférico de Mercurio (MMO, o “Mio”), de la JAXA. La misión sobrevolará una vez la Tierra, dos veces Venus y seis veces Mercurio, antes de entrar en órbita alrededor de este último a finales de 2025.
“Nos queda un camino largo y apasionante antes de que BepiColombo comience a recopilar datos para la comunidad científica. […] Misiones anteriores, como Rosetta y sus descubrimientos pioneros incluso una vez finalizada, nos demuestran que las misiones de exploración científica más complejas bien merecen la espera”, comentaba Günther Hasinger, director de Ciencia de la ESA.

Los dos orbitadores operarán algunos de sus instrumentos durante la fase de crucero, para recopilar datos de valor científico en Venus. Algunos de los instrumentos que están diseñados para estudiar Mercurio de una forma pueden usarse de una forma distinta en Venus, que tiene una atmósfera densa en comparación con la superficie de Mercurio.
“BepiColombo es una de las misiones interplanetarias más complejas que hemos llegado a lanzar. […] Una de las mayores dificultades se debe a la enorme gravedad del Sol, que complica la colocación de una nave en una órbita estable alrededor de Mercurio.
Tenemos que frenar continuamente para garantizar el descenso controlado hacia el Sol, mientras los propulsores iónicos proporcionan el bajo empuje necesario durante la larga fase de crucero” reconoce Andrea Accomazzo, director de vuelos de BepiColombo de la ESA.
Otro desafío es la temperatura extrema que soportará la nave, de -180 ºC a más de 450 ºC, más caliente que el interior de un horno. Muchos de los mecanismos de la nave y los revestimientos externos aún no se han probado en esas condiciones.
El diseño general de los tres módulos también da cuenta de las condiciones a las que habrán de enfrentarse. Los grandes paneles solares del módulo de transferencia deberán inclinarse en el ángulo adecuado para evitar daños por la radiación, pero sin dejar de suministrar energía suficiente a la nave.