Por primera vez se habría detectado la fusión de una estrella de neutrones con un agujero negro.

Desde que supimos de la primer detección de ondas gravitacionales del 2015, sabemos que una nueva era de la física ha comenzado, ya podemos saber mucho más del universo con la información que vemos a través de las ondas electromagnéticas y gravitacionales.

El 26 de abril de 2019 los detectores LIGO, ubicado en EE UU y Virgo, que se encuentra en Italia registraron la que podría ser la primera señal observada hasta ahora de ondas gravitacionales procedentes de la colisión de un agujero negro y una estrella de neutrones.

Instalaciones de Virgo.

El 25 de abril, Ligo (Observatorio de Ondas Gravitacionales por Interferometría Láser) y el detector Virgo, registraron ondas gravitacionales de lo que parece ser un nuevo choque entre dos estrellas de neutrones, remanentes de estrellas masivas que explotaron previamente con altísima densidad.

Pero un día después, la red LIGO-Virgo descubrió otra fuente que, podría ser otrafusión de dos estrellas de neutrones, o algo mucho más interesante: una colisión de una estrella de neutrones y un agujero negro, un evento nunca antes visto.

Estrella de neutrones acercándose a un agujero negro. (NASA/JPL-CALTECH).

Esta penúltima señal es más débil que la otras y se hace más difícil de interpretar. […] En particular, la estimación del cociente de masas entre los dos cuerpos tiene una gran incertidumbre y dificulta identificar si es una binaria de estrellas de neutrones o una fusión entre una estrella de neutrones y un agujero negro”. Este último caso parece el más favorable, pero hay que ser cautos al respecto, por lo que se han de hacer análisis más precisos que llevarán su tiempo”.

Alicia Sintes, líder del Grupo de Física Gravitacional de la Universidad de las Islas Baleares (UIB) y miembro de la colaboración LIGO-Virgo.

El físico Patrick Brady, portavoz de la colaboración LIGO comentaba que identificar esa señal es como escuchar a alguien susurrar una palabra en un bar lleno de gente, “puede ser difícil entender el susurro, e incluso estar seguro de que ha llegado a susurrar“.

Si este evento se confirma, habríamos visto otro tipo de fuente, pero “la cantidad de información que se puede extraer va a depender de lo capaces que seamos de registrar e interpretar este evento tan débil, y de si otros telescopios pueden identificar contrapartidas electromagnéticas como fue el caso GW170817, que revolucionó a la comunidad científica” concluía Sintes. Dicho sea de paso, el caso GGW170817, fue la detección de una fusión de dos estrellas de neutrones, detectadas mediante ondas gravitacionales y a través de ondas electromagnéticas, particularmente, rayos gama de altísima energía.

About Matias Olate

25 años. Futuro Geólogo. Divulgador científico. Estudiantes de Ciencias en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UNCuyo. Escritor, un libro en mi haber. Programador Júnior en Java (muy junior). Community Manager en Planetario Malargüe. Capacitador básico en Ciencias Exactas en el Planetario Malargüe. Guía de Sitio. 02/11/95