Saltar hacia la salud.
Un estudio europeo confirmó que saltar de forma intensiva puede ser el mejor método para fortalecer los huesos, los músculos y el corazón. La falta de actividad física, un problema frecuente en las sociedades actuales, aumentando el riesgo de padecer problemas de salud, reduciendo la calidad de vida y aumentando la probabilidad de sufrir caídas y fracturas. Los astronautas tienen los mismos problemas que personas mayores y los pacientes en cama debido a sus largas estancias en órbita, en un entorno de microgravedad, esto afectan a los músculos y huesos inferiores que en la Tierra soportan la mayor carga.
A 23 voluntarios se los dejó 60 días de reposo absoluto en cama para estudiar cómo sus cuerpos reaccionan a un estilo de vida sedentario repentino, aunque la mitad tuvieron que “saltar horizontalmente” para contrarrestar la ausencia de fuerzas gravitatorias. “Buscábamos un ejercicio de alta intensidad para mantener la masa ósea y muscular. Saltar era el candidato ideal”, explica Andreas Kramer, de la Universidad de Constanza en Alemania. Por tres minutos al día, cinco días a la semana, los participantes saltaron horizontalmente unas 70 veces, simulando la gravedad con cintas elásticas. “Este entrenamiento es efectivo y puede llevarse a cabo en cualquier lugar del planeta y en muy poco tiempo sin necesidad de aparatos”, afirma Andreas. Sus colegas y él están pensando en adaptar el entrenamiento para las personas mayores.
Los resultados podrían beneficiar a numerosas personas en riesgo de padecer osteoporosis.