Satélites
Las actividades en el espacio, incluyendo la tecnología satelital, se remontan a tiempos muy remotos, cuando el hombre empezó a medir los movimientos de las estrellas, dando origen a una de las ramas más antiguas de la ciencia, la Mecánica Celeste.
Mucho después, se empezaron a realizar los primeros cálculos científicos sobre la tasa de velocidad necesaria para superar el tirón gravitacional de la Tierra, desde ese entonces y ya hacen cinco décadas, los satélites tenían un uso exclusivamente militar, para tareas de navegación, investigación y espionaje del ejército.
Hoy sin embargo, se han convertido en una herramienta fundamental en el normal desarrollo de nuestras vidas cotidianas. Los vemos en funcionamiento a través de diversas actividades como la transmisión de televisión satelital, reportes climáticos, transmisiones en directo de eventos deportivos desde cualquier parte del mundo o de corresponsales de telediarios de noticias, así como simples llamadas telefónicas, entre otras cosas. Pero también realizan muchas más tareas que no se encuentran tan a la vista nuestra pero que aún así son esenciales para el funcionamiento de países enteros o incluso se los utiliza en investigación terrestre (por ejemplo para medir el movimiento de continentes y la predicción de fenómenos geológicos, la medición áreas de bosques, etc) o espacial (por ejemplo telescopios para el estudio de galaxias lejanas y del origen del Universo). Lo cual trataremos en los próximos artículos de la semana.